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El Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales ha tenido oportunidad, en su Tercera Asamblea General celebrada en Santiago de Chile, del 6 al 9 de octubre de 1969, de efectuar un examen extenso de la situación de las ciencias sociales en América Latina, y al efecto publicará oportunamente los trabajos presentados y el resumen de las discusiones. Sin desestimar las conclusiones ni los muchos puntos de vista expresados, considera el Consejo conveniente subrayar algunos aspectos de consecuencia inmediata. Por una parte, el Consejo ha podido comprobar los recientes adelantos de las ciencias sociales en América Latina, tanto en lo que se refiere a concepciones teóricas más específicas y creativas, que relacionen el conocimiento universal con la realidad latinoamericana, como en cuanto a la formación y expansión de las instituciones académicas autónomas en que se formen especialistas a nivel superior y se lleven a cabo importantes investigaciones sistemáticas. Asimismo, reconoce las ventajas de la mayor coordinación y promoción logradas a través del propio Consejo. Sin embargo, por otro lado, el Consejo advierte con alarma las crecientes dificultades de orden general en que tienen que desenvolverse las ciencias sociales y los obstáculos de orden administrativo, financiero y político, así como las actitudes de ciertos gobiernos y grupos, que se interponen a determinadas especialidades en algunos de los países de la región y que impiden la libre docencia e investigación.

La elección de un miembro no permanente para el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas en representación de América Latina se convirtió en un duelo entre Venezuela y EEUU ante la práctica pasividad de la mayor parte de los países de la región. Finalmente será Panamá quien a partir del 1 de enero de 2007 sustituya a Argentina en uno de los dos sitios que le corresponden a América Latina en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Tras una encarnizada lucha, ni Guatemala ni Venezuela lograron su objetivo y, forzados por diversas razones, terminaron proponiendo a Panamá como candidato de consenso en representación del grupo regional de América Latina y el Caribe (GRULAC). En este proceso, convertido en una especie de duelo entre Venezuela y EEUU, la mayor parte de los países de la región se convirtieron en meros y pasivos espectadores, sin tomar una posición activa en relación con las distintas posturas enfrentadas, en un proceso que les incumbía directamente.

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El Programa de Investigaciones Sociales sobre Población en América La-tina (PISPAL) tiene como objetivos fundamentales desarrollar teoría y metodología adecuadas a las características de la región; promover la realización de investigaciones que atiendan a las líneas prioritarias definidas; canalizar fondos de investigación que permitan ampliar la capacidad de investigación de los centros nacionales y la incorporación y adiestramiento de investigadores noveles; y facilitar el intercambio de información básica y la discusión de los resultados y conclusiones alcanzadas a través del análisis científico, organizado para ello reuniones de trabajo, seminarios y otras actividades.